El reciclaje de los tapones de corcho y la reutilización de los materiales prolongan el ciclo de vida del tapón, con lo que ayudamos a conseguir un mundo mejor mediante prácticas sostenibles.
Como mayor productor de corcho del mundo, Amorim ha desempeñado un papel pionero en el reciclaje del corcho. El grupo puso en marcha por primera vez un programa de reciclaje de tapones de corcho en Portugal en 2008, Green Cork, y rápidamente se adoptaron iniciativas similares en otros países, como Estados Unidos y Canadá (ReCork y The Cork Collective), Francia (EcoBouchon), Italia (Etico), España (Cork2Cork), Sudáfrica (Amorim Cork Life) y Australia (ReCork).
En la planta de reciclaje de corcho de Amorim, los tapones de corcho usados se tratan y se transforman en gránulos de corcho, con lo que comienza un nuevo ciclo. Aunque nunca podrá volver a utilizarse como materia prima para otros tapones de corcho, el corcho reciclado puede emplearse en múltiples aplicaciones, desde revestimientos hasta aislamientos, superficies deportivas, pelotas de tenis, zapatos y componentes aeronáuticos.
Solo el 30 % del corcho cumple los requisitos de calidad necesarios para producir tapones de corcho natural, pero el resto no se pierde. Una vez molido y transformado en gránulos, el corcho vuelve al proceso de producción para fabricar tapones técnicos, corcho expandido o compuestos. Los residuos de producción se convierten en biomasa –polvo de corcho– que satisface más del 68 % de las necesidades energéticas del grupo. De las planchas al polvo de corcho, un modelo perfecto de economía circular se hace realidad en el mundo del reciclaje del corcho.
Puesto en marcha en 2008, Green Cork es un proyecto de Quercus, desarrollado en colaboración con Corticeira Amorim y otros socios, que recoge tapones de corcho y financia la plantación de árboles autóctonos a través del Common Forest Programme. Gracias a este programa, ya se han recogido más de 117 millones de tapones de corcho y se han plantado más de 1550 árboles. Un verdadero proyecto de economía circular que no solo amplía el ciclo de vida del corcho, sino que también contribuye de manera positiva a preservar los bosques de Portugal.
Es el mayor proyecto de reciclaje de corcho de Estados Unidos y Canadá, creado en 2008 por iniciativa de la empresa de calzado SOLE. Los tapones de corcho reciclados, recogidos a través de una red de más de 3000 socios, se transforman para aplicarse en la producción de suelas de zapatos.
Puesto en marcha en 2009, es responsable de la mayor parte de los tapones de corcho reciclados por Corticeira Amorim –alrededor de 300 toneladas de tapones al año– y tiene un fuerte componente de responsabilidad social, pues respalda a diversas instituciones benéficas, como Agir Cancer Gironde.
Creado en 2011, cuenta con unos 1000 voluntarios y más de 5000 puntos de recogida. Inspirado en este proyecto y en los estrechos vínculos de Italia con el mundo del diseño y la arquitectura, en 2019 se lanzó la colección SUBER, que ofrece una nueva gama de muebles y objetos contemporáneos fabricados con corcho reciclado.
Baseado numa parceria com os hotéis NH, o Cork2Cork começou em 2011, com o objetivo de recolher rolhas de cortiça em hotéis localizados em Espanha, Bélgica, Itália, Alemanha, França e Países Baixos. Até hoje, mais de duas toneladas de cortiça foram recicladas e 8.000 m² de pavimentos produzidos (o equivalente a cerca de 300 quartos de hotel).
Puesto en marcha en 2013, entre otras iniciativas, Amorim Cork Life ayuda a crear puestos de trabajo a través de la construcción de artesanías y objetos de decoración, a base de tapones de corcho reciclados, lo que genera un impacto real no solo en el medio ambiente, sino también en la comunidad local.
Launched in 2023, in partnership with Dan Murphy and RM Williams, this programme recycles cork stoppers to produce cork soles for boots. New partnerships are being established and, to date, the programme has already collected 1.4 million cork stoppers, promoting an extended life cycle for this product.
Lanzado en 2024, en Nueva York, con el objetivo de reducir los residuos, este proyecto recoge tapones de corcho usados de empresas locales, bodegas y consumidores para reutilizarlos en lugar de desecharlos a los vertederos. Además de promover la economía circular, esta iniciativa informa a las personas sobre la importancia del corcho. A través de asociaciones y campañas de concienciación, el programa no solo refuerza el impacto ambiental, sino también las actividades educativas y la transición hacia los residuos cero.
Separe el corcho de la cápsula para favorecer su rotura.
Deposite la cápsula en el contenedor de reciclaje adecuado. El residuo de corcho será inferior al 8 % en peso.
El corcho puede depositarse en el contenedor de reciclaje de corcho o junto a los residuos orgánicos.